El día 23 de Septiembre de
2011 tuve la fortuna de asistir a tres espacios majestuosos y muy cautivantes además
de interesantes en la ciudad de México; el primero fue la Biblioteca José
Vasconcelos. Un lugar tan exuberante en su diseño pero a la vez agradable a la
vista, es un espacio que te envuelve por su arquitectura a gran escala y la
perspectiva visual de libros volando dentro de los anaqueles, es una obra con
gran visión futurista.
El segundo espacio Casa “Luis
Barragán” esta se convirtió en una gran sorpresa por la excitación sensorial
que causa al pasar de una fachada común y corriente a un espacio tan rico en
efectos visuales que te llevan de la mano a un laberinto de emociones al
escuchar la descripción de cada elemento arquitectónico, artístico, constructivo,
y sobre todo admirable el juego de luz y color. Al recorrer el lugar me
imaginaba lo agradable que era vivir en este sitio, porque cada elementos está
diseñado específicamente para crear un entorno de comodidad, confort y un gran
significado en la relación del espacio con el autor y dueño de tan bella obra.
El tercer espacio y no menos
grandioso La Facultad de Arquitectura de La Universidad Nacional Autónoma de México,
un espacio impresionante lleno de sitios muy interesantes con una planeación y distribución
excepcional, repleta de estudiantes exóticos que le dan al espacio una identidad
particular.
Tres lugares tan distintos
pero que tienen elementos arquitectónicos que hacen que los sentidos se
despierten y absorban la belleza de sus espacios, para así, incentivar el
atreverse a crear obras que enamoren a los habitantes de estas, pero sobre todo
que sean de una gran utilidad además de ser estéticas.
